En Pioneras, la actriz le pone el cuerpo a ocho mujeres cuyas historias dejaron huella en el presente. El programa aparece todos los martes por Canal Encuentro y otras plataformas.
En un nuevo desafío, la actriz Muriel Santa Ana se mete en la piel de ocho mujeres argentinas cuyos trayectos hicieron historia. En la docuficción “Pioneras” -que se ve por Canal Encuentro, la TV Pública y la plataforma Contar-, la intérprete caracteriza a Mariquita Sánchez de Thompson (1786-1868), Raquel Camaña (1883-1915), Ada María Elflein (1880-1919), Juana Manso (1819-1875) y Herminia Brumana (1897-1954). También, a la uruguaya María Abella de Ramírez (1866-1926), a la francesa Gabriela Laperrière (1861-1907) y la intelectual nacida en Odesa, Fenia Chertkoff (1869-1927).
Con dirección escénica de Rubén Szuchmacher y la dirección general de Federico Randazzo, se lo puede ver todos los martes a las 22. “Es un programa con un formato de cuatro capítulos, cada capítulo se acerca a la historia o parte de la lucha de dos mujeres argentinas o extranjeras que desarrollaron su tarea en Argentina, que dejaron la estela de su trabajo acá”, contó Santa Ana a LA CAPITAL.
“Fue un trabajo muy lindo, muy conmovedor, de investigación pero siempre tratando de ponerme a la altura de lo que soy: una actriz que pone el cuerpo. No soy una historiadora”, agregó y contó que, en ese sentido, cada programa contiene también las voces de especialistas que contextualizan el período en que vivió cada protagonista y los logros que obtuvo en su vida.
“Lo importante es que traemos a estas mujeres al presente, porque el legado de ellas es lo que marcan nuestra agenda feminista de hoy, por eso es que están más presentes y más vivas que nunca”, observó. Y definió al trabajo que realizó con cada mujer como una “caracterización con licencias” para lograr darle al ciclo “un perfume poético”.
Cabe señalar que Santa Ana estuvo recientemente en Mar del Plata, durante la realización del 34° Festival Internacional de Cine, oportunidad en la que participó de un pañuelazo a favor de la legalización del derecho al aborto, tema en el que viene trabajando desde hace tiempo de acuerdo a su militancia en el campo del feminismo.
– En “Pioneras” estás vinculando militancia y trabajo. ¿Te preguntaste qué pasaría si llegara a tus manos un proyecto con el que no estás tan de acuerdo en torno al rol de la mujer?
– Depende de las circunstancias y depende de la propuesta global. Puedo hacer personajes de mujeres que no están empoderadas, porque esa es también la historia del recorrido que hacemos todas. Es muy difícil mantener ese empoderamiento. Yo soy una privilegiada que toma decisiones que tienen que ver con mis deseos, pero no siempre fue así y no siempre lo voy a poder mantener así. Trato de trabajar, no con gente con la que estoy de acuerdo, porque eso no sirve de nada, los lugares de trabajo tienen que ser porosos, trato de trabajar con personas que están en una búsqueda, que no siempre es una búsqueda igual a la mía, sino que tienen un compromiso con una búsqueda. Me gusta asociarme a personas que tienen el compromiso con una búsqueda, diferente a la mía, parecida a la mía, igual a la mía y que están comprometidos con algo y que tienen una perspectiva no solo de género, sino una perspectiva positiva sobre el mundo.